El Vendedor Más Grande... ¿del Mundo?

De Cómo Volodimir Zelensky Embaucó al Occidente

Cuando México se estableció con un gobierno de izquierda, muchas alarmas se activaron en "El Mundo Libre" occidental debido a que, en México, muchos países abusivos tenían un excelente espacio de explotación y abuso contando con la complicidad de criollos hijos de europeos, nacidos en México, que crearon una especie de Sub-Raza de aspiracionistas que soñaban con ser de Clase Alta y, cuando lo lograban, creían ser parte de la realeza Europea. Bueno, en resumen, la conversión de México hacia la izquierda, asunto emanado del pueblo raso, hizo temblar a propios y ajenos que ejercían la explotación barata en un país de gobiernos malinchistas. Estratégicamente, México es la parte medular de Latinoamérica y un acceso comercial bastante atractivo del Océano Pacífico al Golfo de México, Caribe y Océano Atlántico y también es el único país de Latinoamérica vecino de Estados Unidos que tiene costas en ambos lados, oriental y occidental.

Mi punto es que México resultaba crucial para la función de muchos monopolios estadounidenses y europeos que lo utilizaban como "Paraíso Fiscal" y "Paraíso de Recursos de Calidad a Bajo Costo". No así Ucrania, el país eslavo hoy en los titulares por su guerra artificial contra la Federación Rusa pero cuya importancia radicaba en su producción agrícola, principalmente de cereales, y por tener a las mujeres más bellas del mundo (perdón si esto suena chauvinista, no lo es, se trata de un criterio occidental, no mío), aparte de eso, Ucrania fue por siglos un cierto apéndice político que a veces dependía de Polonia y a veces hasta de Alemania en conjunto con países igual de menores como Lituania, Letonia, Checoslovaquia y otros. Fue hasta establecida la Unión Soviética que Ucrania cobró más importancia política por su posición junto al Mar Negro y la manufactura de textiles patrocinados por Moscú (y no se le resta a Moscú cierta tiranía Bolchevique que pudiera justificar el resentimiento ucraniano, cabe aceptar). Pero, aparte de eso, Ucrania fue nuevamente un apéndice del poder económico Ruso que sostuvo a la nación eslava, Ucrania, incluso poco después de su tímida independencia en los años noventa del siglo veinte.

En algún momento de mi vida me hice amigo de algunas familias ucranianas que actualmente viven en San Francisco California, dado mi trabajo en la música, y la mayoría de miembros de esas familias coincidieron en un criterio un tanto inquietante (y esto fue incluso antes de la pandemia por COVID):

"En Ucrania los hombres no quieren trabajar. Las mujeres jóvenes buscan trabajos ejecutivos en Kiev o en Dnipro, porque es en donde hay empleos para ellas, y muchas terminan siendo madres solteras. Aquí (Estados Unidos) no es conveniente que lleguen solas o por medio de "Patrocinios" porque son presa fácil de la explotación sexual. Ucrania se está cayendo en pedazos y peor aún con el gobierno de ahora (Petro Poroshenko, 2018) derivado del Euromaidan. Pobre de nuestro país, y la gente ucraniana tan indiferente, tan indolente..."

Luego entonces, mi criterio sobre la exageración del mundo hacia Ucrania no es, dicho sea de esta manera, exagerado. No se supone que se pueda dar un juicio tan peyorativo hacia una nación, y no se debe, pero es verdad que el narcisismo y la arrogancia describen en el mundo a muchos ucranianos nacionalistas jóvenes fanáticos de Zelensky y sus tropas de asalto llamadas "Azov". Jóvenes inspirados por el discurso del odio que fue un recurso válido para los Nazis de Hitler, en boca de militares artificiales capaces de usar armas como cualquier sicario del bajo mundo sin tener una pisca de preparación marcial a la altura de un militar de carrera. Jóvenes que aceptaron la supuesta revolución del Euromaidan y hoy están siendo obligados a combatir en el frente. Igual les valdría mejor rebelarse, al menos les daría una opción de seguir vivos.

Estudiando un poco las razones de Rusia para haber atacado a Ucrania en Febrero de 2022, que de cualquier manera tomaría un buen rato poder justificar, llegué a la parte en que tanto Crimea como Donetsk y Lugansk pedían su independencia de la Ucrania Pro-Derecha y ello derivó en los "Acuerdos de Minsk" que nunca fueron respetados ni por la OTAN ni por el Estados Unidos de Biden y, por supuesto, mucho menos por un narcisista megalómano clínico como es Volodimir Zelensky. En donde todos los intentos por parte de Rusia y Bielorrusia para llegar un acuerdo no tuvieron resultados, Zelensky apeló al egocentrismo del Partido Demócrata y de los derechistas y monarquistas europeos, y sacó raja para poder enfrentar a su molino de viento, Rusia, y de paso obtener recursos financieros poniendo en bandeja de plata los recursos naturales de su país para que occidente se pueda servir de ellos, incluída su gente. Es decir, los hombres al frente y las mujeres como candidatas a matrimonio con los otros chicos europeos, o de Estados Unidos, que no se tomarán la molestia de ir a pelear contra Rusia, para eso están los ucranianos. Suena feo, ¿no?, pues lo es.

Pero Zelensky merece mi respeto y admiración. Zelensky no solo logró superar la capacidad de Donald Trump para obtener fondos de la Casa Blanca, y eso suena increíble, Zelensky también superó en ese rubro al propio Elon Musk, tan narcisista como Zelensky, pero con fortuna hecha a pulso. Zelensky consiguió poner los ojos del mundo en él, ya sea a favor o en contra y su febril discurso logra convencer a los muchos idiotas que creen a ciegas en CNN, Fox News y DW. Zelensky ha logrado hacer de sí mismo "El Niño Dentro del Pozo" para la opinión pública y ha conseguido vender mediáticamente la imagen de "Caudillo" igual que Adolfo Hitler, Benito Mussolini y Francisco Franco hicieron en su momento. Zelensky pelea su guerra de escritorio sacando fondos de Europa y la Casa Blanca de Biden haciendo creer al mundo cosas tan estúpidas como "Trump está de parte de Ucrania", y él sabe que es mentira y sabe que Donald Trump no va a quemar su mejor carta pateando a Putin porque sabe que, al final de cuentas, Donald Trump NO es idiota y toma más en serio una carrera política y militar seria como la de Vladimir Putin que la de él. Si el mundo le cree sus fantasías a Zelensky, podría entenderse, pero lo grave es que Zelensky se crea sus propias mentiras (y que asuma que no existe un alto porcentaje de gente en el mundo que nos reímos de él).

Zelensky me tiene impresionado porque ha obtenido en dos años una cifra record que un equipo olímpico o una organización benéfica no podría obtener en diez. Pero la OTAN y Biden me tienen aún más impresionado, han conseguido tener una guerra contra un país al que le tienen miedo, Rusia, sin poner un solo soldado y sin mancharse de sangre las manos. Al fin y al cabo tienen a un idiota útil como Volodimir Zelensky.

Es cuanto

Messy Blues