Factoy, Table dance, hijos ilegítimos y el chiquero en la administración panuchista de Salvatierra, Gto.
Aunque creo que este tópico debría ir en mi sección de "Salvatierra Martir", creo que se ha ganado cierto derecho a ser emitido a nivel resistencia debido a su naturaleza denunciante y, aunque por más que lo busqué no lo hallé, refrescar un poco comentarios que hice sobre la saliente administración panuchista en la que para variar existieron zánganos que chuparon el presupuesto a sus anchas escudados en su chaqueta mental de "Al servicio del pueblo".
Existió en aquella pasada administración un sujeto que, por ser hijo de una de las mas ultraderechistas panuchas en Salvatierra, gozó de seis años de sueldo sin hacer nada para justificarlo. El caballero hasta permiso pidió el año pasado por seis meses y de regreso le devolvieron el puesto, gastó lana a lo cañón haciendo viajes a Guanajuato capital comiendo en suntuosos lugares y hoteles a cuenta y cargo del erario municipal. Como este, ya hay ahora otra bola de vividores que no tardan en quebrar nuevamente las arcas y justificar nuevos impuestos y una nueva alza al predial.
Pero donde las dan las toman. Dícese que ese ex mantenidillo y aún protegido del panuchismo lanuza-hernandista cuentos y leyendas como haber visto cómo cierta bailarina de table prefirió al hijo de ahora alcalde y que ese hijo del ahora alcalde dejó por su parte a su anterior cara mitad por ese capricho y a la larga se tuvo que marchar, el hijo del ahora alcalde, al gabacho por alguna de sus típicas idioteces poniendo pies en polvorosa (apoyado por el ahora alcalde) y que la bailarina se ha quedado como el fido de las dos tortas y, en fin, que los braguetas persinadas tienen tanta cola que les pisen que llenarían un sitio web de candentes historias y escándalos sexuales o afrentas realmente escalofriantes.
Existe aquí en Salvatierra un heredero de la estirpe Cárdenas quien obviamente no se tragó el cuento de que el ahora alcalde haya ganado por la buena y cuenta el chisme que se hizo de palabras ese Señor Cárdenas con el ahora alcalde y que, en un extremo alarde de triunfalismo pendejo, el ahora alcalde le dijo al caballero que era "...un hijo bastardo del General Cárdenas..." por lo que este caballero, para mí muy respetable, Cárdenas envió al hospital al hoy alcalde unos días antes de su usurpación oficial, perdón, de su toma de posesión.
Mentiras o no, para saber; lo cierto es que esta administración, como muchas panuchas del país, van a pagar el precio de haberse impuesto de manera ilegítima y eso ha comenzado a apreciarse a pocos días de funciones.
Saludos
Messy Blues
1 comentario:
No puede ser; ¿qué bola de cabrones se ha posesionado de Guanajuato?
Bien, en este caso, por los Cárdenas.
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